La Cámara Nacional de Industrias (CNI) presentó los datos del impacto del contrabando en la economía nacional en un encuentro de gremios de industria y comercio de Perú, Chile y Bolivia, que conforman el consejo regional contra este flagelo.

“El contrabando causa pérdidas en recaudación fiscal superiores a los 865 millones de dólares anuales. La cooperación entre gremios empresariales y el Estado es esencial para combatir de manera efectiva esta problemática”, refirió Gonzalo Morales, vicepresidente de la CNI de Bolivia y presidente de la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz).

Dijo que además el comercio ilícito representa el 8% del PIB (Producto Interno Bruto) boliviano, y que mueve más de 3.500 millones de dólares.

Los datos se presentaron en el III Encuentro de Gremios y Cámaras Sudamericanas por la Lucha contra el Comercio Ilícito, desarrollado en Lima, Perú.

En el evento, los gremios conformaron el Consejo Sudamericano de Lucha Contra el Contrabando, con el objetivo de desarrollar estrategias conjuntas para fortalecer la colaboración regional y afrontar así el comercio ilícito en la región

Los primeros miembros del consejo son la Cámara Nacional de Industrias (CNI) de Bolivia, la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) de Perú y la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CNC) de Chile.

Morales lamentó que, actualmente, el contrabando también involucra al crimen organizado.

El 1 de septiembre, el viceministro de Lucha contra el Contrabando, Luis Velásquez, informó que se identificó a la población orureña de Sacabaya, frontera con Chile, como un centro de acopio de todo tipo mercadería de contrabando procedente del vecino país.

Dio cuenta de que, en un megaoperativo en la localidad orureña, se afectó al contrabando con aproximadamente Bs 350 millones ($us 50 millones).

Datos

En el encuentro de industriales, José Pakomio, presidente de la CNC de Chile, enfatizó en la necesidad de institucionalizar los espacios de cooperación entre países sudamericanos, que permiten compartir experiencias y coordinar esfuerzos para identificar y combatir las rutas del comercio ilegal, mejorando los controles fronterizos y enfrentando a las bandas criminales que lucran con el comercio informal.

En tanto, Felipe James, presidente de la SNI de Perú, destacó que el comercio ilícito, más allá de su impacto económico, constituye una amenaza a la seguridad nacional que compromete la integridad de los países. “La frontera Perú-Bolivia es la más permeable que tiene el Perú, y también es una de las más permeables de Sudamérica”. Fuente: AEP